En el nuevo escenario planteado tras la exclusión de las empresas argentinas de la lista de exportadores de biodiesel a España, en Base de Datos (Meridiano 107.1), Luis Zubizarreta, presidente de Carbio, analiza las consecuencias.
-¿Cómo está armado el escenario, cómo se ha cerrado Europa para biocombustibles argentinos?
-Lamentablemente es la tormenta perfecta. Todo empezó en España hace ya varios meses. El gobierno español arrancó cortando el flujo de exportaciones de Argentina a su país, fue como represalia por lo de Repsol. España es el principal destino de exportaciones de biodiesel en Europa. España arrancó con esa amenaza y Argentina llevó a la OMC el caso que determinó que estaba en contra de las leyes de comercio internacional y España tuvo que dar marcha atrás. Después vino la investigación por dumping de Europa que fue escandalosa porque Europa nos puso aranceles de más del 20 % en las exportaciones de biodiesel.
También hubo un castigo a Indonesia en una medida proteccionista y fuera de derecho porque los números con los que llegaron a su conclusión son totalmente objetables y ahora la Argentina va a reclamar esa medida en la OMC en un proceso que va a llevar años y mientras tanto al industria se quedó sin su principal destino de exportación, y a eso se suma esta nueva medida de España, que es una segunda barrera que se suma a los aranceles.
Han armado una lista de empresas tachadas en España?
-En realidad armaron un cupo y verifican las empresas que entran y misteriosamente las empresas argentinas no entraron en él. El argumento ya no es Repsol porque no lo puede decir pero es nueva medida proteccionista y no hay justificación para q las empresas argentinas no hayan entrado. Es una segunda barrera, la primera ya nos sacó de la cancha esta es como un candado doble. Lo importante es ver desde Argentina cómo podemos aprovechar esta situación y si podemos ingeniárnoslas para que las empresas no paren y para aprovechar un combustible barato que producimos en Argentina y que es mas barato que el que hoy importamos ese es el planteo que nosotros estamos haciendo a las autoridades.
-¿Cuál era el volumen de exportación hasta el año pasado a España y Europa?
-A Europa le exportábamos un valor de 1700 millones de dólares en 2011 y 2012, un 90% de nuestras exportaciones. España significaba la mitad de ese total y acá el insumo del biodiesel es el aceite de soja, y Argentina es el principal exportador del mundo de aceite de soja y lo que va a pasar ahora es que vamos a reprimarizar nuestras exportaciones de aceite, en lugar de exportar biodiesel vamos a exportar aceite y quitamos valor agregado a la cadena de la soja y lo preocupante es que tengamos que vender más aceite, porque nos lleva a competir con aceites más baratos como el de palma y eso baja el precio de todo el aceite.
Mencionaba Indonesia porque caminó el sendero de un consumo mayor doméstico, aprovechar el biodiesel barato en vez de bajar los brazos, lo consumieron domésticamente. Así se daría valor al producto nuestro estrella que es la soja.
-¿Que posibilidad hay de hacer algo de eso aquí?
-Estamos tratando de empujar esa decisión. Acá hay un tema que no es menor, que es impositivo. El gasoil que importan las petroleras está exento de pagar el 41% con lo cual las petroleras prefieren pagar eso con el descuento que un biocombustible que paga impuestos y le decimos al Gobierno que es una situación para nada racional que un importado pague cero impuestos y el nacional sí pague el impuesto del 41%. Hagamos números correctamente para que el biodiesel tenga sentido económico para el petrolero.
-Desde el punto de vista técnico, para el consumo de los autos, ¿cambiar el porcentaje de corte se podría hacer?
-Hay límites razonables. Claramente consideramos que todavía hay bastante margen para aumentar el corte. Estamos cortando en el 7% y 8%. Nosotros hicimos pruebas serias en motores normales donde hicimos el corte al 20% sin ningún inconveniente. No digo que arranquemos yendo al 20%, pero sí podemos ir al 15% sin problema y a eso se suma todos los eléctricos o los motores grandes, no hay problema en llevarlos al 20%.
Tenemos para agregar al consumo doméstico al menos 700 o 800 mil toneladas de biodiesel que hoy importamos como gasoil. Actualmente estamos consumiendo en nuestros motores el 7% u 8% de biodiesel, producido por empresas más pequeñas, porque argentina trato de fomentar a las empresas más pequeñas, que venden productos más caros de lo que las empresas más grandes pueden ofrecer.
-Esto de los impuestos ¿quien lo puede resolver?
-Hay una unidad de monitoreo, hace varios meses el gobierno aumentó las retenciones. Ahí están Kicillof, la ministra de industria, Devora Giorgi, el secretario Moreno y el ministro De Guido. Ese grupo de funcionarios es el que se encarga, nosotros estamos hablando con el ministerio de economía, con la gente de Kicillof, y están analizándolo para ver que hacer y esperamos una pronta respuesta, no debe tardar mucho porque las plantas están paradas.
-Cuando hablas de que las plantas en lugar de fabricar biodiesel van a fabricar aceite no es que se reconduzcan, quiere decir que las plantas se paran, ¿verdad?
-Exactamente, son dos procesos distintos. La soja llega a las plantas, se muele y por un lado sale aceite y por otro harina vegetal, que es proteína para alimentos de animales y el aceite entra en un nuevo proceso químico que lo transforma en biodiesel y glicerina. También Argentina era un gran exportador de glicerina, y es gracias al concepto de agregar valor y aprovechar la materia prima.PUNTO BIZ.