Endesa ‘enciende’ el plan piloto para crear una biorefinería.
En tiempos de crisis, nada se desaprovecha; ni siquiera el aire.
Endesa ha puesto en marcha una planta piloto donde se cultivan microalgas utilizando, entre otras cosas, el dióxido de carbono (C02) de los gases de combustión que genera su central térmica en Almería.
Luego, estos microorganismos se cosechan y se pasan por una centrífuga que separa la biomasa del agua de mar que la contiene.
¿El objetivo? Utilizar la biomasa para fabricar biodiésel, biofertilizantes y otros productos de interés.
Las primeras estimaciones apuntan a que se podrían recuperar entre 300 y 600 kilogramos de CO2 por hectárea al año y producir entre 150 y 300 kilogramos de aceite biodiésel por hectárea y día.
El proyecto, que se gestó en el 2006 promovido por el Ministerio de Ciencia e Innovación, se ha iniciado con la creación de biodiésel a nivel de laboratorio pero pretende demostrar la viabilidad del concepto de biorrefinería industrial.
«Según sea la especie de microalga que se cultive, así será lo que se logre extraer de su biomasa en cuanto a lípidos, proteínas, vitaminas, etc. Lo que se fabrique (biodiésel, compuestos, complementos nutricionales, antibióticos, fertilizantes y otros) dependerá de ello», explicó el subdirector de I+D de la dirección general de generación de Endesa, Juan Carlos Ballesteros.
La instalación ocupa hoy unos 1.000 metros cuadrados, donde hay unos 13 metros cúbicos de cultivo. En la segunda fase del proyecto, se ampliará la instalación en otros 1.000 metros cuadrados y se buscará optimizar la producción.
Nada se desperdicia
Para que la captación de CO2 sea más eficiente, Endesa ha patentado un sistema que depura los gases procedentes de la central y los pasa a fase acuosa, en la que son mejor absorbidos por las algas.
Además, la planta aprovecha el agua de mar del litoral que tiene en frente. Ésta llega por la misma toma que sirve para refrigerar la central y se le añaden nutrientes. Gracias a la fotosíntesis, las microalgas utilizan los gases en fase acuosa para crecer y multiplicarse dentro de este medio de cultivo.EL ECONOMISTA/ESPAÑA.