El Reportero /Comunicado Hermosillo, Sonora, Febrero de 2014 .
El proyecto es: “La producción de la halófita agroindustrial salicornia bigelovii con la interacción de bacterias promotoras del crecimiento de plantas bajo condiciones de aridez y salinidad”.Surgió el año 2004 y su principal impulsor es Félix Ayala Cháidez, quien fue investigador la Unidad Regional Norte, Campus Santa Ana.
Ante la fuerte demanda mundial relacionada con la producción de biocombustibles, el Departamento de Agricultura y Ganadería de la Universidad de Sonora mantiene importantes convenios con empresas trasnacionales que se dedican a la producción y generación de motores para equipo aeronáutico.
Omar Rueda Puente, profesor investigador adscrito al Departamento, destacó que en el “sueño dorado” de que con la producción de un nuevo biocombustible sostenible (diésel verde) a base de halófitas se podrá propulsar los jets del futuro –se afirma que emitirá un 50% menos de dióxido de carbono durante su ciclo de existencia que los combustibles fósiles–, “aún hay mucha polémica al respecto”.
Afirmó que ello se debe a que la capacidad energética del biocombustible respecto al generado por los combustibles fósiles es mucho menor, por lo cual la propulsión reduce la fuerza de despegue de las naves; luego entonces, añadió, deberá trabajarse con otros productos e, incluso, tomar en cuenta los altos costos y cantidades que se demandan en esta área.
En ese sentido, dijo, mientras la tecnología y desarrollo de combustibles alternos avanza en el mundo, en lo que corresponde a la aviación ya están dándose los primeros pasos con “diésel verde” en avionetas dirigidas que vuelan a baja escala sobre Irán e Iraq.
Hoy, aseveró, la contribución científica de nuestra institución es la de capacitar a nivel de monocultivo en la búsqueda de producir halófitas con potencial agroindustrial, utilizando agua de mar, con asistencias técnicas enfocadas a diversas zonas desérticas del mundo, como de Atacama, Chile; Irán, el Golfo Pérsico y Centroamérica.
Asimismo, Rueda Puente puntualizó que no sólo en las plantas tolerantes a la salinidad radica la generación de biocombustibles, sino también en la generación de alimentos, de ahí que en fecha próxima se asistirá a Namibia y Somalia, África, donde ofrecerán capacitación –sobre un área de casi 1,000 hectáreas en la parte Este del continente– para desarrollar un sistema de producción de salicornia bigelovii.
Rueda Puente también reveló que la contribución no solamente va dirigida hacia la generación de aceites verdes para equipo aéreo, sino también en la producción de energía para electricidad, y que actualmente colaboran a nivel Latinoamérica con la industria General Electric para establecer la primera planta de luz base en salicornia y poder dar electricidad a unas 30,000 personas.
Dio a conocer que el proyecto, que se impulsa como modelo a nivel mundial, se denomina “La producción de la halófita agroindustrial salicornia bigelovii con la interacción de bacterias promotoras del crecimiento de plantas bajo condiciones de aridez y salinidad”, mismo que surgió el año 2004 a través de su principal impulsor, Félix Ayala Cháidez, quien fue investigador la Unidad Regional Norte, Campus Santa Ana.
En este proceso, agregó, participan investigadores del Departamento –con experiencia en salinidad, uso de agua de mar y halófitas–, así como las universidades autónomas de Baja California, Chapingo y la Agraria “Antonio Narro” de Saltillo, Coahuila; el Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste (Cibnor), y expertos de Islas Canarias y Chile, principalmente.
Omar Rueda Puente sostuvo que en este tema hay grandes expectativas, ya que se cuenta con mucha tecnología y conocimiento, y en el cual nuestra institución es pieza importante, junto con la FAO, ONU y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Fuente: El Reportero de la Comunidad