La colza, una planta oleaginosa de flor amarilla, ha despertado el interés de
sectores de la producción agrícola en Mendoza. Ocho comunas mendocinas, la mayoría
de la Zona Este, promueven el cultivo de la canopia (un híbrido con bajo nivel de
ácido) como materia prima del combustible biodiésel.
El proyecto surgió ante la necesidad de buscar energías alternativas al uso
contaminante de gasoil para combatir las heladas. El entonces director de
Contingencias Climáticas de la provincia de Mendoza, Jorge Silva Colomer, inició a
modo experimental el desarrollo de este cultivo para bajar los costos en la chacra.
La idea es que en un mismo proceso se pueda elaborar biodiésel y obtener aceites
vegetales y harinas proteicas, dijo Silva Colomer, ahora responsable del proyecto
colza en el INTA, del departamento mendocino de Junín.
La especie se adapta a una diversidad de condiciones de suelo y clima. Es una
oleaginosa de la que es posible lograr, al procesar la semilla, entre un 45% y un
50% de aceite. En Argentina hay unas 20.000 hectáreas de colza, distribuidas en la
región Pampeana, y un incipiente mercado alentado por las multinacionales que
compran para exportar.
En Mendoza, la producción de colza está en etapa experimental y no superan las 30
hectáreas plantadas en la Zona Este. En esta región, con tierras áridas y riego
artificial, se formó una red de pequeños productores interesados en diversificar el
perfil de sus explotaciones y que pretenden lograr el autoabastecimiento de
combustible para sus chacras.
«Es una alternativa para aprovechar tierras ociosas, abandonadas, o para sembrar
entre camellones, aprovechando que el ciclo biológico va de abril a noviembre», dijo
Silva Colomer.
La zona este mendocina demostró óptimas condiciones para el cultivo de colza. Aunque
los resultados se verán en diciembre, con las primeras cosechas, los responsables
del proyecto esperan obtener 3.000 kilos de semilla por hectárea en producción bajo
riego, lo que superaría el promedio nacional de 1.600 kilogramos por hectárea.
Si por cada 100 kilos de semilla se pueden extraer 40 litros de combustible, en
Mendoza se obtiene un rendimiento de 1.200 litros por hectárea cultivada en esas
condiciones. El director del área de Desarrollo Económico de Junín, Jacinto Romero,
dijo que los primeros estudios permiten estimar en 90 centavos de peso el costo para
producir un litro de biocombustible a partir de colza.
La zona este tiene el clima adecuado para la producción de colza. Es un cultivo de
invierno, que se planta en marzo y se cosecha en noviembre, y no compite con los
cultivos tradicionales. Es barato, una hectárea tiene un costo que ronda los $ 700.
Además de biodiésel, de cada 100 kilos de semillas pueden sacarse casi 50 kilos
harinas proteicas para la alimentación de ganado. Es también un cultivo relacionado
con la apicultura. Romero asegura que la flor de la colza aumenta la producción de
las colmenas.
«Pueden sacarse unos 300 kilos de miel por hectárea», detalló Romero. Los
intendentes de Junín, San Martín, La Paz, Lavalle, Rivadavia, Maipú y Las Heras,
prometieron fomentar el cultivo de colza como materia prima de la elaboración de
bicombustible para producir beneficios económicos a los productores y abastecer sus
propias flotas vehiculares.
El biodiésel es un combustible de origen biológico, obteniendo a partir de la
transesterificación de los aceites vegetales o animales. La ley 26.093, que regula
la producción y comercio de biocombustibles en Argentina, establece el corte de al
menos el 5% de biocombustibles con los combustibles fósiles, a partir del 2010.
Hay una sola planta elaboradora de biodiésel en La Colonia, Junín, a 60 kilómetros
de la capital mendocina. Puede producir unos 2 mil litros de biodiésel al año. El
fabricante de biodiésel Pablo Mahuad, calculó que en la zona este mendocina son 120
los productores que están diversificando sus cultivos con canola y pueden llegar a
las mil hectáreas en la región el año que viene.
Para el fabricantes es fundamental la alianza con productores locales. «Si hay que
traer la materia prima de otras provincias, ya no es rentable», opinó Mahuad, que
espera que las primeras 30 hectáreas mendocinas estarán al ciento por ciento
operativa a fines de 2007.
Foto: EN JUNIN. PABLO MAHUAD Y JACINTO ROMERO VISITAN UNA PLANTACION DE COLZA PARA LA
ELABORACION DE BIODIESEL
Fuente: Diario Clarin
Roxana Badaloni.
mendoza@clarin.com