Un grupo argentino recorrió una planta canadiense que integra la producción de carne y etanol.

Esta semana, un contingente de argentinos visitó en Canadá la empresa Paund Maker, donde funciona una verdadera convergencia productiva: un feedlot, acopio de granos y producción de etanol.

La visita formó parte de un viaje de capacitación técnica que estuvo organizado por el INTA Manfredi, la Universidad de Saskatchewan (Canadá) y otras entidades de la agroindustria de ese país.

Desde Argentina, además de los del INTA, fueron representantes de empresas de maquinarias agrícolas y de AAPRESID.

Una vez en territorio canadiense, visitaron la empresa Paund Maker, que realiza acopio de granos, producción de etanol y tiene un feedlot, en la localidad de Lanigan, en la provincia de Saskatchewan.

La planta produce 12,5 millones de litros de etanol por año y tiene una capacidad de 28.500 cabezas en el feedlot (hoy con 22.500 cabezas en engorde).

La empresa tiene una planta que muele y procesa 100 toneladas de trigo por día para fabricar etanol. Una vez finalizado el proceso, se obtiene una mezcla llamada «cerveza», que contiene 10% de alcohol.

La planta trabaja 24 horas al día durante 350 días al año. Sólo para 2 veces, muy poco tiempo, para mantenimiento.

El rendimiento de la planta es el siguiente: cada 100 kg de trigo se obtienen 35 litros de etanol.

Los subproductos de la producción de etanol van al feedlot, donde los animales son comprados y entran con un peso promedio de entre 200 a 400 kilos y salen terminados con 540 kilos, con una ganancia de peso diaria del orden de 1,250 kilos.

En promedio los animales están en el feedlot unos 200 días.

El feedlot es un negocio que puede dar o no ganancias, ya que depende del precio de compra de los animales y del precio de la carne, que en Canadá está muy influenciada por el precio del producto en EE.UU..

En estos momentos, con el alto precio que pagaron por el ternero y el mayor costo del trigo, que es la materia prima, el negocio del feedlot no es del todo rentable, pero sí lo es el sistema integral, dado el buen valor percibido por el etanol, debido a la alta demanda del producto, indicaron los técnicos del INTA.

De todas formas los dueños el establecimiento saben que se trata de un negocio de largo plazo y que en la próxima compra de ganado los precios se pueden reacomodar.

La planta de etanol y las instalaciones para el feedlot implicaron una inversión de 12 millones de dólares, que se fueron generando con los aportes de los 200 productores socios de la planta, pero también con las propias ganancias que genera el establecimiento. Hoy cada productor posee un capital de 60.000 dólares.

La historia del feedlot arrancó en 1970, con 60 productores asociados que tenían 2.500 cabezas. Diez años después, en 1980, alcanzaron las 8.500 cabezas, buscando alternativas productivas más rentables a la sola producción de granos.

A comienzos de los 90 construyeron la planta para producción de etanol, utilizando como materia prima «el trigo», el cultivo más importante de la región.

Canadá produce en total unas 55 millones de toneladas de grano, concentrado en las provincias de Manitoba, Alberta y Saskatchewan. Esta ultima produce más del 60 % del total de los cereales, oleaginosas y legumbres del país

Allí, la agricultura también tiene su crecimiento: hoy el productor promedio tiene unas 1.500 hectáreas cada uno, cuando veinte años atrás ese número sólo era de 400 por cada uno.

La ración

En el feedlot canadiense, la ración para los animales se compone de silo de cebada (planta entera), rollo de avena desmenuzado y grano de cebada, entre otros elementos, más suplementos energéticos y minerales. Además, una buena cantidad del subproducto del trigo fermentado para producir etanol. Cuando los animales entran al feedlot, la ración es de 30% grano y 70% forraje. En la terminación es 80% de grano y 20% de forraje.

Fuente: Diario Clarín