Con una producción mundial que en 2008 alcanzó los 13,8 millones de toneladas en biodiésel y 74, 7 millones de metros cúbicos de etanol, hoy los grandes jugadores en el negocio de los biocombustibles son Estados Unidos, Brasil, la UE, la Argentina, China y, en menor medida, India y Canadá.
Entre todos estos países, según Claudio Molina, director ejecutivo de la Asociación Argentina de Biocombustibles y Hidrógeno, en materia de biodiésel, Europa lleva la delantera por su decidida política de promoción de los biocombustibles. «La UE tiene una mezcla obligatoria del 5,75% y elevó su meta al 10% para 2020», dijo Molina.
«Las proyecciones confirman que habrá una creciente demanda de biocombustibles de la UE lo que es una oportunidad para nuestro país para ocupar una porción significativa de dicho mercado», remarcó Molina.
Como contrapartida, la UE tiene una capacidad instalada ociosa muy alta en toda la industria de combustibles. «Esta capacidad ociosa que registra la industria europea representa un factor de presión para el establecimiento de barreras arancelarias y paraarancelarias a las referidas importaciones», dijo Molina. Hace poco, por ejemplo, la industria europea de biodiésel acusó a la industria argentina de biodiésel de estar subsidiada, como consecuencia de la vigencia en nuestro país de derechos de exportación diferenciales a favor del biodiésel. Este reclamo fue rechazado por el Tribunal de Justicia Europeo.
El otro gigante de los biocombustibles es Estados Unidos, que se especializa en etanol de maíz, y tiene 174 plantas en funcionamiento, con capacidad de producir casi 44 millones de toneladas de bioetanol. En cuanto a biodiésel, la capacidad instalada es de alrededor de 7 millones de toneladas anuales.
De acuerdo a Martín Fraguío, director ejecutivo de la Asociación Maíz y Sorgo Argentino (Maizar), el mercado mundial del etanol está creciendo con rapidez. De los 80 países importadores, los destinos más importantes son EEUU y la UE. «Por otro lado, aunque China es hoy un importador menor, tiene una meta de mezcla del 10% que en gran medida abastecerá con etanol importado», destacó Fraguío.
Brasil es hoy el primer exportador mundial, y viene liderando la apertura de mercados internacionales de etanol, ya que todos los países importadores tienen aranceles muy altos. Por eso, este país viene liderando la negociación de una cuota con la Unión Europea para lograr ingresar a ese mercado sin aranceles. Sería importante que la Argentina se sumara a estas gestiones», destacó Fraguío.
Fuente: La Nación