También acortarán los plazos de eliminación del impuesto sobre los intereses, el clima de la reunión fue «distendido» .
Las entidades reclamaron un fondo anticrisis de 1000 millones de pesos, dicen que las medidas no alcanzan.
El Gobierno y el campo acercaron ayer posiciones en una reunión en la que se anunció la exención impositiva para el biodiesel y un recorte en el cronograma de eliminación del gravamen sobre los intereses.
Así, el diálogo entre las cuatro entidades rurales y el ministro de Economía, José Luis Machinea, luego del paro agropecuario de octubre pasado, pudo definirse como «distendido».
De todos modos, no todo fue «vinos y rosas», pues los representantes del campo aprovecharon la oportunidad para reclamar la conformación de un fondo anticrisis de unos 1000 millones de pesos. «Coincidimos en la urgencia de constituir un fondo especial para contener a la gente y financiar programas agropecuarios», dijo al salir de la reunión, Eduardo Buzzi, titular de la Federación Agraria Argentina (FAA). El dirigente aclaró que aún no habían recibido una respuesta afirmativa y consideró que los fondos podrían provenir de «afuera».
El secretario de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, Antonio Berhongaray, se refirió tangencialmente al tema. «La eliminación de los impuestos que hemos encarado significará ya un costo fiscal de 2000 millones de pesos y nos demandará un esfuerzo muy grande», dijo el funcionario.
Contrariamente a lo habitual en estos casos, ayer las autoridades dispusieron que los reporteros gráficos no pudiesen tomar fotografías de la reunión. Pero pudo saberse que también participaron el secretario de Programación Económica, Miguel Bein y el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo. Este último estuvo sólo unos minutos para explicar que la decisión de disolver el Instituto Nacional de Semillas (Inase) forma parte de un proyecto de cerrar todos los organismos descentralizados.
Al termino del encuentro, Manuel Cabanellas, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), señaló que «no se había avanzado mucho» para cambiar el «perfil» crítico en el que desenvuelve el campo hoy.
Sin embargo, el dirigente rural elogió algunas medidas como la de recortar el cronograma de reducción del impuesto que se aplica sobre los intereses de los créditos. «También es interesante el tema de no cobrarle el impuesto a la transferencia de los combustibles (ITC) al biodiesel», consideró Cabanellas.
El denominado biodiesel, un combustible fabricado sobre la base de soja o girasol, ha ganado en los últimos tiempos una relevancia particular. Aunque al menos restaría un par de años para que en la Argentina comience a fabricarse en forma masiva.
«Podría ser más barato que el gasoil común y los productores no dependerían de los precios que aplican las compañías, ya que se fabricaría a partir de su propia producción», expresó Buzzi.
Por las carnes
Por otra parte, el Gobierno intentará esta semana que la ley del Instituto de Promoción de Carnes sea votada en forma «extraordinaria» en el Congreso. De no ocurrir esto, deslizó ayer Berhongaray, podría apelarse a otro tipo de mecanismos.
También quedó conformada a partir de la reunión «una mesa de trabajo» compuesta por las cuatro entidades, Bein y Berhongaray para discutir la problemática agropecuaria.
«Hay que unificar criterios en cuanto a definir la crisis y esa mesa puede servir para plasmar los proyectos especiales de cada sector», expresó el vicepresidente de Coninagro, Mario Raiteri. No obstante, aún faltaría definir la fecha de la primera reunión de ese comité, que también estará integrado por la Sociedad Rural Argentina.
En otro orden, Cabanellas encomendó a las autoridades que determinen quiénes fueron los culpables y responsables del ingreso de aftosa en el país. «En la misma línea también exigimos un control más estricto de los productos provenientes de países infectados con «vaca loca»», concluyó Cabanellas.
Por Franco Varise
De la Redacción de La Nación
Fuente: La Nación