El secretario Néstor Roulet aseguró que la obtención de una caña de azúcar transgénica podría abrir el camino a elevar el corte de etanol en las naftas.
El gobierno nacional planteó la posibilidad de elevar el corte de biocombustibles con un piso del 20%, tanto para el etanol como para el biodiesel, con el objeto de atender las necesidades que afronta el sector de producción primaria.
El secretario de Agregado de Valor, Néstor Roulet, aseguró que la definición y obtención de una caña de azúcar transgénica podría abrir el camino a elevar el corte de etanol en las naftas «del 12% al 22% ó incluso al 25%»; algo que debería ir unido a la modificación de los motores, similares a los que usan los vehículos en Brasil.
En una rueda de prensa, el funcionario explicó que la cartera de Agroindustria, que dirige Ricardo Buryaile, está trabajando sobre esas cuestiones de manera conjunta con el Ministerio de Energía y Minería, que conduce Juan José Aranguren, y también con entidades como Asociación de Fábricas de Automotores (ADEFA) y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI). De todas formas, el funcionario aclaró que no se trata de un cambio «inmediato, ni de uno o dos años, pero mientras esté la decisión política, se llega».
El tema será analizado el próximo lunes en el marco de la Mesa Sucroalcoholera, convocada a instancias del decreto 543, firmado por Mauricio Macri el 31 de marzo pasado, que permitió elevar el corte del etanol en las naftas de 10 a 12%. Respecto a la situación del biodiesel, Roulet reconoció que el sector productor «está en una situación difícil» y consignó que desde el ámbito oficial se busca llevar el nivel del corte del 10% actual al 20%. «Allí es totalmente distinto al caso del etanol, ya que no se necesita la modificación de motores», explicó.
Consultado sobre las demoras registradas en torno a la difusión de una caña de azúcar transgénica creada en Tucumán, Roulet admitió que este evento «está prácticamente a salir» y atribuyó a su demora a «un tema de mercado y este año se va a rever».
Desde Agroindustria reconocen la necesidad de sacar un saldo exportable en la producción de caña de azúcar en el noroeste argentino y allí hacer esfuerzos para incrementar la producción de etanol. «Tenemos actualmente un tope en cuanto a la producción de biocombustible. Nos tenemos que sentar con ADEFA y decir ?vamos a pasar de un corte del 12% al 22% ó bien del 25%?; es decir utilizar el sistema Flex de Brasil».
En esa línea, el secretario agregó: «el 12% es el tope que podemos tener en forma momentánea y coyuntural y si nos planteamos elevarlo tenemos que pensar en un salto grande, ya que el salto intermedio la gente de las automotrices y el INTI, dicen que es imposible, porque resulta complicado hacer adecuaciones en los actuales motores».
Fuente: Infobae IProfesional