El próximo 23 de julio, la compañía vallecaucana celebrará sus 150 años de fundada, año en que Santiago Martín Éder compró unas tierras en la zona rural de Palmira, donde producía, entre otros cultivos, caña azucarera y funcionaba un trapiche que producía unos 200 kilos diarios de azúcar.
De un ingenio azucarero nacido hace 150 años, Manuelita se convirtió en uno de los grupos empresariales del sector agropecuario más importantes, no solo de Colombia, sino del subcontinente.
Hoy, la compañía, además de producir azúcar, tiene negocios en los sectores de los biocombustibles (etanol y biodiésel), la producción piscícola (mejillones y camarones) y la agricultura (espárragos, uvas, palma aceitera y aguacate).
Los nuevos negocios de Manuelita, fundada hace 150 años, arrancaron desde finales del siglo pasado, en 1998, con la compra de la peruana Agroindustrial Laredo, una empresa creada en 1813, que tras ser nacionalizada, fue quebrada por los sindicatos de trabajadores.
Actualmente, está dedicada a la producción de azúcar de alta calidad orientada a atender al sector industrial peruano.
Sus actividades se desarrollan en Trujillo, donde cuenta con 7.137 hectáreas cultivadas en caña azucarera, de las cuales más del 30 por ciento están sembradas en el desierto liberteño, utilizando tecnologías de riego por goteo.
Como subproductos en la elaboración del azúcar, Laredo comercializa mieles, bagazo y alcohol industrial y extrafino, utilizado en la industria farmacéutica.
En el presente siglo, en el 2002, Manuelita arrancó con su proyecto de planta de alcohol carburante, que comenzó a producir en el año 2006.
Esta tiene una capacidad de producir 70 millones de litros anuales de etanol, derivado de la caña azucarera.
“La participación de Manuelita en este mercado ha estado enmarcada en la política nacional de biocombustibles, cuyos objetivos son la generación de empleo rural e industrial, la estabilidad energética del país y la protección del medio ambiente mediante la reducción de emisiones de efecto invernadero”, dice la empresa.
En el 2005, los grupos empresariales Manuelita, Pantaleón (Guatemala) y Unialco (Brasil), decidieron montar el Ingenio Vale do Paraná, donde la colombiana tiene el 25 por ciento del paquete accionario.
Actualmente, produce alcohol para el mercado brasileño, mientras que a mediano plazo iniciará la producción de azúcar con fines de exportación.
El Ingenio está ubicado en la zona cañera de Paraná, ubicado en el Estado de Sao Paulo, Brasil.
El Grupo Manuelita, a través de su empresa Mansa Agroindustrial do Brasil, desarrolla las labores de campo y provee caña a este ingenio.
Para el año 2007, la empresa Agroexportaciones Manuelita inició sus operaciones en Perú, donde está dedicada a la producción de frutas y hortalizas frescas para atender los mercados internacionales, principalmente Estados Unidos, Europa, China y Japón.
Sus cultivos están ubicados en la región de Ica.
En la actualidad cuenta con 504 hectáreas en las cuales produce espárragos, uvas y aguacates.
En el marco de la estrategia corporativa de Manuelita, de diversificación de inversiones, en el mismo año, la empresa decidió ingresar en el negocio de la acuicultura en Chile, asociándose con Inversiones Coihuin.
Allí se constituyó Mejillones América, dedicada a la producción de mejillones de cultivo, que se destinan para exportación al mercado europeo.
La explotación está ubicada en la isla de Chiloé y está encerrada por un mar interno, frío, limpio, profundo, rico en plancton, las condiciones particulares para la producción de mejillones.
Mejillones América tiene 250 hectáreas de concesiones de mar, en aguas frías, puras y profundas.
Esta genera 112 empleos directos e impacta positivamente en sus comunidades vecinas.
Para el 2010, en Colombia, Manuelita contaba con más de 24.000 hectáreas sembradas con caña azucarera y muele no menos de 10.000 toneladas diarias de caña.
En cuanto a sus relaciones con las comunidades vecinas, la empresa dice que es consciente de que un negocio solo puede ser productivo mientras sus comunidades hayan superado condiciones difíciles.
Por esto, el Grupo Manuelita desarrolló una estrategia social enfocada en desarrollo de las necesidades básicas de las comunidades, fomento a la generación de ingresos complementarios y liderazgo ambiental.PORTAFOLIO.