Una plantación de granos de soja en Chacabuco, Argentina, abr 24 2013. Argentina dijo el jueves que profundizará sus controles sobre el registro de existencias de granos en el país, en momentos en el que el Gobierno, ansioso por el ingreso de necesitadas divisas, acusa a agricultores de acopiar sus cereales para especular con su valor.

Argentina dijo el jueves que profundizará sus controles sobre el registro de existencias de granos en el país, en momentos en el que el Gobierno, ansioso por el ingreso de necesitadas divisas, acusa a agricultores de acopiar sus cereales para especular con su valor.

El país sudamericano es el principal exportador internacional de aceite y harina de soja, y el tercero de la oleaginosa en grano y de maíz, lo que, junto a elevadas tasas a sus exportaciones, significa ingresos por miles de millones de dólares para el Estado.

En las últimas semanas, el Gobierno acusó a agricultores de no vender sus reservas de soja para especular con la tasa de cambio oficial del peso con la moneda estadounidense, que a fines de enero sufrió mayor devaluación en 12 años.

«Establécese un régimen de registración sistémica de movimientos y existencias de granos no destinados a la siembra -cereales y oleaginosos- sean propias o de terceros», informó el Gobierno en el Boletín Oficial.

De acuerdo al comunicado, entrarán en la norma centros de acopio, fábricas del sector de la agroindustria -incluyendo plantas de biodiésel-, fraccionadores de granos como también compradores de granos para consumo propio.

El régimen, que entrará en vigencia el 1 de abril y será supervisado por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), no sólo exige la declaración de existencias de granos, sino su traslado.

En Argentina, los productores agrícolas están obligados a declarar ante la AFIP el volumen de sus cosechas, pero el Gobierno ha acusado a estos de informar valores inferiores a los reales.

«Es un nuevo control sobre lo que ya existe. Esto no va a fomentar el aumento de la producción, es solo más burocracia», dijo a Reuters el consultor agropecuario Arturo Navarro.

«Si bien ya existía un sistema de información periódica para los operadores del comercio de granos, esta resolución los obliga a declarar diariamente el movimiento de cereales y oleaginosas», agregó Carlos Garetto, el presidente de Coninagro, una de las principales entidades rurales del país, a través de un comunicado.

En los campos de Argentina, según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, los productores finalizaron la siembra de la soja y el maíz 2013/14, cuyas cosechas serían de 53 millones y 23,5 millones de toneladas -respectivamente-, y en algunas partes ya iniciaron la recolección de los primeros lotes del cereal.

De acuerdo a datos oficiales, aún quedan cerca de 6 millones de toneladas de soja 2012/13 por vender, lo que representa cerca de 3.200 millones de dólares.

«Cuando se está cosechando, lo más importante es cosechar, no informar lo que se cosecha», dijo Navarro.(Reporte de Maximilian Heath).TERRA.