Un detallado estudio de los costos directos, de comercialización, cosecha y tributarios pone en blanco sobre negro los números del agro.
De cada $10 que gana un productor de soja de Santa Fe, el Estado le lleva $7.9. Y de cada $10 que gana un productor de trigo santafesino, el gobierno le lleva $6.9. Quedándose hasta con el 80% de las ganancias, el gobierno ya es hoy el socio mayorista del productor.
¿De donde surgen los números? Punto Biz realizó un detallado estudio de la estructura del costo de los productores de la zona nucleo para ver la incidencia real de la carga impositiva.
A nadie le gusta mostrar mucho sus números reales, así que punto biz realizó varias consultas a productores de la zona para poder compararlas y tener una estimación real. A continuación, los resultados.
El caso de la soja
Para este relevamiento, se tomó un rendimiento de 32 quintales por hectárea y un precio de $840.89 por tonelada limpia para el productor.
Ese valor surge de calcular un precio de u$s 460 la tonelada FOB, a los que –según la nueva “tablita”– hay que restarle 40.48% en retenciones, por lo que queda u$s 273 la tonelada. A ese precio se le sacan u$s 6 de gastos de fobbing y quedan u$s 267 la tonelada ($840.89 a un tipo de cambio de 3.14)
En materia de costos directo, para este caso el productor gasta por hectárea $144 en labores, $127 en semillas, $623 en agroquímicos y fertilizantes; sumando así $893 por hectárea.
En materia de costo de cosecha y comercialización, para este caso el productor gasta $202 en cosecha (7.5% de precio lleno por rinde), $250 en flete (corto y largo), $35 en acondicionamiento y 81 en comisión (3%); quedando un gasto de $567 por hectárea. También hay que sumar gastos de estructura, que es de $160.
A la hora de hablar de impuestos, impuestos provinciales insumen $50 y el impuesto al cheque agrega $32; quedando así un resultado operativo de $987 por hectárea. A ese valor hay que restarle el 35% de Ganancias ($345), quedando así $641 y luego $60 de Bienes Personales.
En definitiva, al productor le quedaron limpios $582 por hectárea. Ahora, ¿cuanto se llevó el Estado? Si se suman todos los impuestos, la suma da $ 2.318 por hectárea. Más simple: el 79% del ingreso.
¿Al maíz le va mejor?
Para este relevamiento, se tomó un rendimiento de 90 quintales por hectárea a $502 la tonelada. Ese valor surge de u$s 220 la tonelada menos el 24.5% de retenciones, que da u$s 166 la tonelada FAS y al que hay que restarle u$s 6 de fobbing, quedando finalmente u$s 160 la tonelada ($502 al tipo de cambio de 3.14)
En materia de costos directos, por hectárea los labores insumen $144, las semillas, $349; y agroquímicos y fertilizantes, $762; sumando $1.255.
En lo referente a costos de comercialización y cosecha, tienen que pagar por hectárea $317 por cosecha (7% del precio lleno por rinde), $702 por flete (corto y largo), $126 por acondicionamiento y $136 por comisión (3%), sumando así $1.280. Hay que sumarle también $160 en gastos de estructura.
Por hectárea, los impuestos provinciales se llevan $50, el tributo al cheque significa $54 y Bienes Personales cuesta $60.
En definitiva, el resultado operativo es de $1.662 por hectárea. A ese valor hay que restarle el 35% de Ganancias ($663) y queda como resultado después de Ganancias $999. Esa es la plata limpia que se lleva el productor por hectárea.
¿Y cuanto se lleva el Estado? Sumando el total de impuestos pagados, el Estado se queda con $2.298 por hectárea. En otras palabras, se lleva el 69% del ingreso de la producción.
Preguntas y dudas
Quedándose hasta con el 80% de las ganancias, el gobierno se convirtió en el socio mayorista del productor y la preguntas que asoman son: Cuando los precios bajen (algo que más tarde o más temprano ocurre en todos los mercados) ¿quién va a poder aguantar? ¿Qué negocio podrá soportar semejante presión impositiva? ¿Será ese el momento donde el socio mayorista de la renta aproveche para quedarse también con el capital? O mejor, dicho: ¿será el momento cuando los amigos del socio mayorista se queden con el capital, como pasa hoy con petroleras y aerolíneas? Otra duda: ¿una diferencia de $10 entre lo que se lleva de soja y lo que se lleva de trigo el Estado es el gran incentivo oficial para combatir la llamada sojización?
Por Mariano Galindez
Gentileza de Punto Biz para Nextfuel-Biodiesel.com.ar