La Cámara de Empresas Pymes Regionales Elaboradoras de Biocombustibles (Cepreb) se reunió ayer en Rosario para analizar líneas de acción luego que el viernes el gobierno nacional publicara los precios de referencia.
«En un país donde todo sube al biodiesel el gobierno le baja el precio. Debe ser el único precio que baja en la Argentina de hoy», reflexiona Federico Pucciariello, síndico y miembro fundador de la Cámara de Empresas Pymes Regionales Elaboradoras de Biocombustibles (Cepreb).
La entidad -que reúne a 23 pymes de Santa Fe, Córdoba, La Pampa, Neuquén, Entre Ríos y San Luis- se reunió ayer en Rosario para analizar líneas de acción luego que el viernes el gobierno nacional publicara la semana pasada los precios de referencia del biodiesel con respecto a septiembre con una baja frente a los que venían cobrándole a las petroleras por el biodiesel para el corte obligatorio que tienen que hacer con las nafta.
«Nosotros estamos obligados a seguir entregando el bio a las petroleras para no perder el cupo, pero lo hacemos sin precio. Recién la semana pasada salieron los precios de septiembre y resulta que fue d 5.250 pesos por tonelada, mientras que en marzo pasado fue de 5.497 pesos. Así que además de tener la demora, nos deflacionan», se queja el empresario santafesino.
Pucciariello apuntó que el precio del biodiesel retrocedió casi un 5 por ciento en los últimos meses, al mismo tiempo en lo que va del año los insumos utilizados en la producción aumentaron (metanol de YPf el 32%, metilato de sodio, 21%) y la paritaria sectorial (24%) y flete camionero (18%). Otro insumo fundamental que venía bajando empezó a subir desde agosto, y lo hizo fuerte en octubre, es el aceite de soja.
El sector, que dice tener una rentabilidad del 4%, asegura no poder aguantar así mucho más tiempo y temen por el cierre de plantas y el despido de personal
«Todo sube pero el biodiesel baja. Eso sí, en los surtidores las naftas no bajan. Acá hay un modelo de país pensado para beneficiar las cuentas de las petroleras en detrimento de todo el resto. Y eso ocurre desde que el gobierno tomó el control de YPF», resaltó.
Los empresarios decidieron en la reunión de ayer reforzar el canal de diálogo con funcionarios y legisladores. Si bien el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, era el más duro negociador que tenían las empresas bio, el flamante ministro de Economía, Axel Kiciloff, es quién bajó las decisiones que se vienen tomando desde hace un año, que tanto las afectaron como la baja de precios y la suba de retenciones.
Más cómodos a la hora de negociar con el ministro de Planificación, Julio de Vido, ahora el sector la tiene más complicada en la arena política. Es que además del bloque en Europa para el biodiesel argentino, el ministro de Economía no los quiere mucho. Llueve sobre mojado.PUNTOBIZ.