Nueva York, 29 ene (EFE).- Intel, el mayor fabricante mundial de microprocesadores, informó hoy que se ha comprometido a comprar más de 1.300 millones de kilovatios/hora en certificados de energías renovables durante el próximo año, lo que equivale a retirar de las carreteras 185.000 vehículos durante ese periodo.
Con esa iniciativa anunciada hoy, Intel pretende reducir el impacto medioambiental de sus actividades empresariales y se convierte así en el mayor comprador de esos permisos en Estados Unidos, según datos de la Agencia para la Protección del Medioambiente del país citados por la propia empresa.
Los certificados de energía renovable (REC, por sus siglas en inglés) son unas «unidades de cambio» en el mercado de la energía verde que acreditan el carácter renovable de los recursos energéticos.
La EPA calcula que la compra anunciada por Intel, que incluye una combinación de energía eólica, solar-hidroeléctrica y de biomasa, tiene un impacto medioambiental equivalente a la retirada de más de 185.000 vehículos de las carreteras cada año, o al ahorro de la electricidad anual necesaria para cubrir las necesidades medias de más de 130.000 hogares de Estados Unidos.
«La compañía espera que esta cifra récord sirva de ayuda para estimular el crecimiento del mercado de la energía ecológica, algo que, a su vez, puede impulsar la generación de más energía de este tipo para, en último lugar, reducir sus costes», apuntó Intel en un comunicado.
Esta adquisición coloca a Intel en el primer puesto en la lista de los 25 principales socios en energía ecológica de la EPA, que ha creado un programa para fomentar y reconocer las adquisiciones voluntarias de energías limpias entre las empresas, como una forma de reducir el impacto que genera el uso de la electricidad convencional.
«Tenemos un largo historial relacionado con el compromiso con el medioambiente y el ahorro energético tiene una gran importancia en todo lo que hacemos, desde la elaboración de transistores hasta el diseño de microprocesadores», aseguró el consejero delegado y presidente de Intel, Paul Otellini, quien también es miembro del Consejo de Copenhague sobre Clima.
Ese consejo trabaja para conseguir la elaboración de un tratado climático efectivo para todo el mundo en el próximo Congreso de las Naciones Unidas sobre Medioambiente que se celebrará el año que viene en Copenhague.
Recientemente, la EPA concedió a Intel el premio Líder en Ahorro de Agua durante 2007, por sus esfuerzos para disminuir, reutilizar y reciclar agua en su fábrica de Chandler, Arizona.
En los últimos 7 años, la compañía asegura haber invertido más de 20 millones de dólares en más de 250 proyectos para ahorro de energía, unas iniciativas que lograron ahorrar más de 500 millones de kilovatios hora, una cantidad de energía suficiente como para cubrir las necesidades medias de unos 50.000 hogares estadounidenses.
Fuente: Yahoo