Un funcionario estadounidense advirtió que si en última instancia ambas partes no pueden ponerse de acuerdo, “ningún continente estará capacitado para dialogar con China y las naciones emergentes”.
La Unión Europea (UE) y Estados Unidos sellarían la semana próxima un acuerdo provisional en materia de estándares comunes de comercio de biocombustibles, algo que es fruto de los nuevos esfuerzos para incrementar el flujo comercial y de inversión entre ambas partes.
El anuncio se realizará el 9 de noviembre durante la primera reunión del Consejo Económico Transatlántico entre Estados Unidos y la UE, una iniciativa creada el pasado abril por el presidente estadounidense, George W. Bush, y la Canciller alemana, Angela Merkel.
El objetivo del Consejo es armonizar ciertos estándares y reducir los obstáculos burocráticos en un rango amplio de áreas, desde derechos de propiedad intelectual hasta mercados financieros.
“Los procesos que alcanzan las regulaciones en ambos lados del Atlántico son bastante diferentes. Eso es algo que necesita ser revisado”, aseguró C. Boyden Gray, Embajador estadounidense en el bloque europeo.
“En última instancia, si Estados Unidos y la UE no se pueden reconciliar y negociar más consistentemente, ningún continente estará capacitado para dialogar con China y las naciones emergentes”, sentenció el funcionario del país norteamericano.
“Esto no significa estar en una posición anti-China. Significa estar a favor del crecimiento económico”, advirtió Gray.
El acuerdo de biocombustibles está enfocado en la apertura de los mercados europeos a la jatropha, un arbusto cerealero poco conocido hallado en los climas tropicales y subtropicales que algunos productores consideran uno de los más apropiados para la generación de energías verdes.
Bajo una directiva del bloque comunitario, el 5,75% del combustible para el transporte, excluyendo a los aviones, deberá ser biocombustible para 2010, y se pronostica que crecerá un 10% para 2020.
En la perspectiva estadounidense, las regulaciones de la UE sobre la materia prima del biocombustible se inclinan a favor del aceite de colza o canola, la mitad de la producción europea y el primer producto de los agricultores alemanes.
“En Europa, el biodiesel está definido de tal manera que parece que excluye a toda materia prima excepto al aceite colza o canola”, apuntó Gray. “Pero confío en que la jatropha tendrá éxito”, se mostró confiado.
“Creo que podremos anunciar estándares técnicos bastante firmes para fin de año. Eso es importante en una manera práctica, porque hay estándares ahora que no son comunes”, destacó.
Las compañías europeas reclaman al país norteamericano por el subsidio de un dólar al galón de B99, un producto hecho con un 99% de biodiesel de soja y un 1% de mineral de diesel. Fuente: ADNMundo