SAN SALVADOR (AFP) – Veinte países de Latinoamérica se comprometieron este viernes a seguir «impulsando con énfasis» el desarrollo de los biocombustibles con apoyo de instituciones financieras multilaterales, durante un foro sobre energías limpias en San Salvador.
Foto:Mauricio Lima/AFP
«Hay un convencimiento por parte de los países en que cada día es más necesario impulsar el desarrollo de los biocombustibles, es una realidad que no podemos apartar y que, afortunadamente, está ganando más respaldo entre los que necesitan los biocombustibles y entre aquellas instituciones que pueden apoyar con fondos para su desarrollo», aseguró el secretario de la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE), Alvaro Ríos.
Los biocombustibles son combustibles líquidos producidos a partir de biomasa, es decir, de productos agrícolas.
Ríos, ex ministro de Hidrocarburos de Bolivia, señaló que en Latinoamérica se presentan «varias» opciones de producción de biocombustibles a partir de materia prima como la caña de azúcar, el maíz, el higuerillo, la palma africana y la soja.
El seminario latinoamericano de biocombustibles, que cerró este viernes en San Salvador, fue organizado por la OLADE y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA).
Entre los países participantes se encuentran Brasil, Colombia, Chile, Venezuela, Perú, Argentina, Bolivia, México, Cuba, los seis píses de Centroamérica, Republica Dominicana, Jamaica y otras naciones del Caribe.
El director general del IICA, Chelston Brathwaite, recordó que a nivel mundial la demanda por el petróleo se incrementa y cada días es más difícil cubrirla, por lo que se vuelve «imperativo» el «rápido desarrollo de los biocombustibles».
«La contaminación global por causa de las emanaciones de gases de los hidrocarburos es enorme, y ese es uno de los muchos factores que deben sopesar los países, pues los biocombustibles son mucho menos dañinos», remarcó Brathwaite.
Datos revelados durante el seminario indican que la demanda mundial de petróleo es de 120 millones de barriles por día, y que la tendencia es que en 2020 esa demanda crezca a 170 millones de barriles diarios.
«La opción de los biocombustibles es mucho más viable para que los países ya no inviertan tanto de sus fondos para la compra de combustibles fósiles y, lo que va quedando, es impulsar la producción, pero para ello es necesario un financiamiento», insistió Ríos.
El especialista en energías renovables del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Arnaldo Vieira, señaló que la institución mantiene abierto el acceso a créditos para el desarrollo de iniciativas empresariales privadas en el área de energías renovables como los biocombustibles.
Según Vieira, el BID otorga carteras de créditos a entidades privadas de hasta unos 10 millones de dólares para financiar proyectos energéticos.
«Hoy si alguien quiere financiar una planta de biocombustibles puede hacerlo, es una facilidad adicional que concede el banco», remarcó el especialista del BID.
Según Vieira, el BID anunciará proximamente un programa denominado «Energía Verde», el cual contempla colocar una cartera de unos 300 millones de dólares para financiar proyectos de biocombustibles en Latinoamérica.
Fuente: AFP/Yahoo