EFE , Madrid/Transformar las redes eléctricas actuales para hacerlas inteligentes es el camino que facilitará un sistema de generación eléctrica 90 por ciento de energía renovable en el año 2050, según se recoge en un informe de Greenpeace.
Se trata básicamente de «unir la red eléctrica con internet», según ha explicado hoy Sven Teske, director de la Campaña Energía Renovable de Greenpeace Internacional, durante la presentación del estudio «Renovables 24/7. La infraestructura necesaria para salvar el clima».
El informe explica cómo se pueden conectar redes inteligentes locales y regionales con una súper red de alta tensión para proporcionar un suministro fiable a todas horas sin ninguna necesidad de recurrir a centrales térmicas de carbón ni nucleares.
Las redes inteligentes combinarían fuentes de generación distribuidas para generar centrales eléctricas virtuales, de tal forma que pequeñas instalaciones eólicas, solares, geotérmicas y de biogás pueden proporcionar la misma electricidad que una central eléctrica tradicional, pero con mayor eficiencia y flexibilidad y menos emisiones de CO2, según el estudio.
Serían necesarias, además, unas súper redes, que usarían líneas de corriente continua en alta tensión para transferir electricidad a largas distancias con gran eficiencia.
Según Greenpeace, esto permitiría que excedentes de energía eólica del Mar del Norte, de energía solar de España o del norte de África se puedan transferir a otros países.
A nivel europeo, la organización propone reforzar las 34 interconexiones de alta tensión entre países vecinos, lo que supone realizar mejoras en 5.347 kilómetros, 17 nuevas interconexiones (5.125 kilómetros) y 15 nuevas conexiones de «súper red».
Esto supondría que del total de 13.000 kilómetros de red existentes se expandirían un 4 por ciento y el coste aproximado rondaría los 209.000 millones de euros (5.225 millones anuales hasta 2050).
Para los responsables de Greenpeace «no es una inversión muy grande» para los países de la Unión Europea teniendo en cuenta que, por ejemplo en Alemania, los gestores de la red invierten más de 2.000 millones de euros al año en el mantenimiento de ésta.
El estudio ha comparado los datos meteorológicos de los últimos 30 años en Europa con las curvas de demanda actual y concluye que con la red existente haya una probabilidad de sólo un 0,4 por ciento (12 horas al año) de que la alta demanda suceda cuando la generación solar y eólica son bajas.
El refuerzo en la red que propone eliminaría esa pequeña incertidumbre, según Greenpeace.
José Luis García, responsable de la campaña de Cambio Climático y Energía de Greenpeace España, ha insistido en que el informe demuestra que «es posible eliminar la energía nuclear y la que procede de combustibles fósiles con pequeñas modificaciones en la red añadiendo inteligencia y comunicación al sistema eléctrico».
García ha explicado que esta propuesta «concreta» tiene como objetivo vincular el debate sobre las interconexiones eléctricas con el de las energías renovables, teniendo en cuenta que ambas son prioridades de la Presidencia Española de la UE.
Se presenta, además, en un momento en que los veintisiete están preparando un Plan de Acción Energético que incluye importantes iniciativas para infraestructuras en la red.
Fuente: ADN España