Lunes 7 de Diciembre de 2009 | Hay preacuerdo en la actividad para que rija una maquila de alcohol, similar a la del azúcar. Los excedentes de caña se destinarán a producir alcohol para suministrar al programa de etanol, que entrará en vigencia en enero.

MENOR PRODUCCION. Las pérdidas en la caña por efecto de la sequía afectarían los planes de los azucareros. LA GACETA / JORGE OLMOS SGROSSO

Esta semana será clave en la definición de la participación que tendrán los cañeros en el programa nacional de biocombustibles, que se pondrá en marcha el 1 de enero próximo. En principio, existe un preacuerdo entre los factores que integran la mesa de seguimiento de las exportaciones de azúcar para que se implemente una «maquila de alcohol» en el caso del etanol que se obtenga directamente del jugo de la caña.

A través de la maquila, los ingenios entregan a los cañeros un 60% del azúcar que se extrae de la caña. Resta definir el porcentaje de alcohol que recibirán los productores cuando la caña se muela sólo para producir etanol.

El coordinador de la mesa cañera, Bernabé Alzabé, comentó a LA GACETA que se estableció que todo el alcohol que se produzca para los biocombustibles sea de jugo directo (el que se elabora a través de la melaza -hidratado- se destina a las industrias farmacéutica, de bebidas, etcétera).

Actualmente, en la Argentina se producen 220 millones de litros de alcohol por año, de los cuales 150 millones se consumen el mercado interno y el resto se exporta. Tradicionalmente, este alcohol fue de propiedad de los ingenios, y se mantendría de esta manera.

Alzabé también señaló que hay consenso para que los excedentes de la caña de azúcar se destinen preferentemente a la elaboración de etanol, que permitiría promediar un precio mayor al que se obtendría con la exportación de azúcares crudos. «Otro aspecto que se habló es que cada año, antes de iniciar la zafra, se definirá el volumen de excedentes posibles para que se destine a la producción de alcohol», añadió el dirigente.

El presidente de la Unión Cañeros Independientes de Tucumán (UCIT), Sergio Fara, sostuvo que se debe reivindicar al cañero, de manera que cada uno tenga la participación que corresponda en el negocio del etanol.

El industrial Jorge Rocchia Ferro confirmó que los excedentes de caña se destinarán a la producción de etanol. «Los buenos precios del azúcar en el mercado internacional sólo durarán un tiempo. Es por eso que los biocombustibles son la salida para la actividad», remarcó.

Por su parte, el presidente de Cañeros Unidos del Este (CUE), Mario Tizeira, reclamó que el Ministerio de Desarrollo Productivo que convoque a las entidades cañeras para que se defina una política conjunta en el sector, con el objeto de negociar la participación de los productores en el negocio de los biocombustibles. A partir de 2010, producirán alcohol para mezclar con las naftas los ingenios La Corona (Bionergía La Corona SA), Santa Rosa (Compañía Bioenergía Santa Rosa SA), La Florida (Compañía Bioenergética La Florida SA), Santa Bárbara (Energías Ecológicas de Tucumán SA) y La Trinidad (Biotrinidad SA). En el norte, deshidratarán alcohol en 2010 los ingenios Tabacal (Alconoa SRL), San Isidro (Bio San Isidro SA), Ledesma (Bioledesma SA) y Río Grande (Río Grande Energía SA). Está previsto que los ingenios tucumanos y los de Salta y Jujuy elaboren en conjunto 250 millones de litros de etanol para combustibles, en un negocio que generará alrededor de $ 580 millones.

Poner los pies en la tierra

La posibilidad de que se produzca menos caña de lo previsto en la zafra 2010 a causa de la última sequía genera cierta preocupación entre los factores azucareros. El presidente del Centro Azucarero Regional de Tucumán (CART), Julio Colombres, opinó que habría que pensar en destilar y en deshidratar más alcohol que en distribuir lo que aún no se tiene.

Fuente: La Gaceta