Todos los acontecimientos ocurridos en los últimos meses, no hacen más que reafirmar que los biocombustibles son una realidad y que llegaron para ocupar un espacio creciente en la matriz energética.
No politicemos a los biocombustibles. Bush pasará, Chavez también, y los biocombustibles, producidos con criterios sostenibles y a partir de una planificación razonable, generarán una importante contribución al medio ambiente y la economía.
No son la panacea, son una buena alternativa, junto con otras también renovables. El petróleo es todavía abundante y solo lo podrán reemplazar parcialmente varias energías renovables en conjunto.
Qué está pasando hoy?…
1. En la Unión Europea se avanzó en cuanto a la participación de los biocombustibles en la matriz energética hacia el año 2020 (se plantea como minimo un 10 %). La meta de un 5,75 % de participación de los biocombustibles sobre el mercado de transporte, para el año 2010, establecida por la Normativa Comunitaria 2003/30/EC ya no se discute.
Otras cuestiones pasan por contribuir a la sostenibilidad ambiental de la producción, estableciendo un protocolo de certificación para las materias primas que se utilicen en la producción y en el proceso industrial mismo, principalmente para evitar la deforestación en Malasia, Indonesia y en el Amazonas, como efecto colateral del incremento de la oferta de biodiesel; se discuten también los estándares de calidad y la permanencia de barreras para-arancelarias como el Indice de Yodo.
La industria de biodiesel presiona para lograr la imposición de un arancel de importación y/o la implantación de un gravamen al biodiesel importado, principalmente por la influencia del subsidio de US$ 1 por galón otorgado por EE.UU. a las operaciones de consumo y de exportación, como así también, por el potencial de la industria argentina y las futuras imperfecciones que pueden originar en el mercado europeo, la existencia de un significativo diferencial de derechos de exportación en nuestro país, el que hoy es más que necesario, en función de los precios relativos de los combustibles fósiles y el de las commodities agrícolas, más aún, considerando también el avance de la industria americana de exportación.
Con relación al bioetanol, continúan las presiones proteccionistas y el mercado mantiene los altos aranceles.
2. El crecimiento de la industria de bioetanol en EE.UU. ha superado las previsiones y de continuar así, es probable que este año se alcance el cupo máximo otorgado por la legislación para el año 2012, consistente en 7.500 millones de galones por año, volumen beneficiado con el crédito fiscal de US$ 0,51 por galón. El 18 de diciembre pasado se constituyó la Comisión Interamericana de Etanol, siendo esta presidida por Jeb Bush y contando con la participación entre sus miembros de Roberto Rodrigues -ex Ministro de Agricultura de Brasil- y de Luis Alberto Moreno -Presidente del BID-. Nuestra Asociación formó parte del acto de constitución, junto a nuestros amigos de AAPRESID -quienes gentilmente nos trasladaron la invitación.
Se está generando un fuerte debate respecto a la conveniencia de abrir el mercado, el que hoy está protegido por un arancel de US$ 0,54 por galón, más un porcentaje adicional del 1,9 o 2,5 % según se trate de alcohol anhidro o hidratado respectivamente.
Esta Comisión está realizando un estudio marco para sostener la meta de reducir un 20 % el consumo de gasolinas en los próximos diez años. Esto será posible a partir de la posibilidad que EE.UU. importe bioetanol y por ello, se planteó el acuerdo con Brasil, el que es considerado un proveedor confiable.
De prosperar este acuerdo, se potenciarán ambos complejos, habrá transferencia de tecnología a otros países, fundamentalmente los del Caribe, que tienen potencial para el desarrollo de una importante industria a partir de caña de azúcar.
Se torna necesaria la eliminación de los aranceles de importación en EE.UU., en un escenario donde se establezca el libre comercio de bioetanol en toda América.
Por ahora, para exportar bioetanol a EE.UU. hay que triangular por el Caribe, enviando alcohol hidratado, deshidratándolo allí, para aprovechar luego los beneficios del CAFTA. Otra posibilidad, pasa por realizar similar operación con países que tengan un tratado de libre comercio con EE.UU., como es el caso de Chile.
En materia de biodiesel, el complejo industrial progresa día a día, luego que en el último trimestre de 2004, se otorgara el crédito fiscal de US$ 1 por galón. Se están instalando enormes plantas, en general todas las grandes compañías aceiteras multinacionales han dicho presente y como comentaba antes, hay exportaciones que se ven beneficiadas también por dicho crédito fiscal, alterando el comercio internacional.
3. A partir del año próximo entrará en vigencia en Japón, el mandato para incorporar un 3 % de bioetanol a las gasolinas. Se encuentra vigente un programa para reducir progresivamente los aranceles de importación de este producto. Se negocian acuerdos de cooperación y comercio internacional muy importantes con Brasil, principalmente con Petrobras.
4. La producción de bioetanol en China ha crecido significativamente, superando los 4 millones de metros cúbicos. Sin embargo, se plantea un dilema hoy por la utilización de maíz, cereal que tiene un alto consumo interno para alimentos.
5. La producción de boetanol de Colombia -a partir de caña de azúcar- ha tenido un significativo crecimiento, a partir de una legislación del año 2003, que establece el corte obligatorio a un 10 % con las gasolinas y que actualmente se encuentra en vigencia. Se vislumbra a Colombia como un jugador en el comercio internacional de bioetanol.
6. El Banco Interamericano de Desarrollo participa -como comentaba antes- de la Comisión Interamericana de Etanol y su Presidente ha expresado públicamente la creación de una línea crediticia especial para el desarrollo de biocombustibles, por US$ 3.200 millones.
7. Brasil es una gran locomotora. Grandes grupos económicos y financieros de todo el mundo se han instalado para producir bioetanol y/o biodiesel. Se adelantó la entrada en vigencia del corte obligatorio de un 5 % de biodiesel en el diesel,.previsto inicialmente para el año 2013, para el año 2010. Paralelamente, la investigación y desarrollo crece y crece, HBIO, Planta Autónoma para la Producción de Biodiesel con extracción y transesterificación en un mismo proceso, Ester Etílico, Desarrollo de Cultivos Energéticos Alternativos, etc. Y ni hablar de las obras de infraestructura proyectadas, como un extenso alcoducto.
Se plantea también la sustitución de superficies implantadas por tabaco, con cultivos aptos para biocombustibles, una idea que sintoniza con la mejora de las condiciones de salud de la población.
8. Se constituyó un Foro Internacional de Biocombustibles, con la participación de Brasil, EE.UU., UE, China, etc. Nuestro país, quedó afuera, hecho que prueba una vez más que si no desarrollamos una visión de faros largos, perderemos el tren de la historia.No hemos dado un apoyo explícito al libre comercio de bioetanol en toda América y esto representará también una contradicción cuando tengamos importantes excedentes exportables de biocombustibles y presionemos para que se eliminen los aranceles de importación de biocombustibles en los países o regiones potencialmente importadoras.
9. Durante la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso, el Dr. Carlos Kirchner decía (aprovecho para agradecer a un gran amigo, Ricardo Torres, por esta contribución):
La ley de Biocombustibles tiene como objetivos básicos el fomento de la producción de biocombustibles para el mercado externo y el otorgamiento de beneficios fiscales destinados exclusivamente a sociedades agropecuarias y, fundamentalmente, a Pymes agropecuarias y economías regionales.
La reglamentación propone parámetros simples para la producción de biocombustibles para autoconsumo, lo cual va a permitir que los propios productores agropecuarios puedan formar distintos esquemas asociativos para proveerse su propio combustible.
El objetivo planteado para 2010 implica una producción mayor a los 600.000m3 de gasoil y 250.000m3 de bioetanol.
Adicionalmente, el centrar el programa de biocombustibles en el sector agropecuario, se genera un nuevo paradigma en la distribución de la riqueza, ya que podrá participar de la distribución de la renta generada en el sector energético, generando también un nuevo factor dinamizador en ciertas zonas con potencial para incorporarse a la producción agrícola, a partir de los ¨cultivos energeticos¨.
Los biocombustibles no sólo les dan mayor valor a los bienes agrícolas que hoy se producen en el país, sino que abren paso a la siembra de nuevas variedades y en zonas del país hoy consideradas marginales.
En definitiva, la introducción de biocombustibles en nuestra matriz energética no sólo tiene enormes beneficios ambientales sino que nos va a permitir diversificar nuestra oferta energética disminuyendo el peso de los combustibles no renovables e incrementando la participación de los combustibles renovables.
Sería fundamental incorporar a la flamante legislación argentina en la materia, previsibilidad, precepto que está ausente a lo largo de todo su texto…
Esa carencia, está demorando la formación de una oferta interna acorde de biocombustibles a los requerimientos del corte obligatorio que entrará en vigencia en el año 2010, o antes, si así lo decidiere la Autoridad de Aplicación.
Del mismo modo, cada vez más son los potenciales exportadores de biocombustibles que aumentan su preocupación respecto a la evolución de las condiciones que regirán este mercado. Y el Gobierno no abunda en señales…
Por otra parte, en los últimos días se ha multiplicado una campaña en contra de los biocombustibles, la que trae perjuicios importantes al desarrollo de los mismos. Aquí van algunas de mis reflexiones:
a. La OPEP es un cartel y Venezuela forma parte de dicha organización. Un precio de petróleo caro, es la principal causa del Impuesto Inflacionario, el peor de los impuestos y el que más aporta a una distribución desigual de la riqueza. Sería bueno que cuando se habla del dilema entre alimentos y energía se hable de aquél dilema, provocado por una actitud de los poderosos productores y exportadores de petróleo, en contra de los más desprotegidos.
b. El Presidente Chavez ha exteriorizado públicamente un ataque al programa de bioetanol de EE.UU. y de Brasil. Sin embargo, EE.UU. es por lejos el principal socio comercial de Venezuela, lo que representa una importante contradicción.
c. Cuando el precio del barril de petróleo bajó de US$ 60, el Presidente Chavez activó gestiones en la OPEP para sostenerlo. Es para aplaudir tal actitud oligopólica?…Es para aplaudir también que el petróleo venezolano, al que los importadores lo abonan a precios internacionales formados en el Mercado de New York -principalmente-, se imponga como base de la integración sudamericana?… Pareciera que la fórmula que moviliza masas es petróleo caro, alimentos baratos, soslayando que el principal problema, no pasa por allí, sino por la pésima distribución de la riqueza, la que se potencia con salarios de hambre. Hay que recordar también que cuanto más alto esté el tipo de cambio, menos poder adquisitivo tendrán los salarios. Y que el precio de los alimentos se forma en los mercados internacionales, por lo que sigue la evolución del Dólar. Ergo, Dólar barato, alimentos baratos (y esto no es una apología de la Convertibilidad, la que ha tenido efectos destructivos a partir de 1995/96, tema sobre el que me referí hace muchos años, elaborando una enorme crítica).
d. Si el Presidente Bush pretendió enarbolar la bandera de los biocombustibles para frenar el supuesto avance del Presidente Chavez en Sudamérica, es un acto que bajo ningún aspecto se puede aplaudir. La mejor política para Sudamérica y para el Mundo, será aquella que se sustente en la defensa de la democracia, de la soberanía de los pueblos (evitando intromisiones en la política exterior que deterioran la dignidad de los mismos como si existieran derechos adquiridos de uno por encima de la autodeterminación de otros), la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo, el fin de la carrera armamentista y el otorgamiento de ayudas económicas significativas a los países más pobres, eliminando al mismo tiempo, las barreras arancelarias y para-arancelarias que protegen al agro en los países desarrollados, y no, usando de rehén a un género de bienes ambientalmente aptos, como el caso del bioetanol.
e. Las granos influyen muy poco en la estructura de precios de muchos alimentos, por ejemplo, el trigo influye menos de un 20 % en el precio del pan. Esto mismo ocurre con la tortilla, común en México. Es injustificable suponer que aumentos de hasta 400 % como los ocurridos con este último bien, tengan como causa el aumento del precio del maíz, ocasionado a su vez, por el aumento de la producción de bioetanol en EE.UU.
f. Hace poco más de dos años atrás, el precio interno del maíz estaba por debajo de US$ 70, hecho que generaba perspectivas grises para la evolución de este cultivo. El enorme crecimiento de la producción de etanol en EE.UU. ayudó a cambiar el panorama. Cuando se habla del dilema entre alimentos y energía, no se computa el efecto positivo del aumento de la producción, por causa de la demanda incremental generada por los biocombustibles.
g. Muchas de las voces de alerta en contra de los biocombustibles, coinciden en sus críticas en contra de los transgénicos. Sin embargo, los transgénicos han producido un aumento tal en la oferta de granos, que en mi opinión, terminaron con la amenaza que siempre generó la vieja teoría de Robert Malthus, a través de la cual se sostenía que la producción de alimentos crecería en progresión aritmética y la población, en progresión geométrica. Un aumento de la oferta de granos, necesariamente reduce los precios de equilibrio y una baja, aumenta los precios de los mismos. En el mercado de granos se verifica habitualmente la Ley de King.
Si analizamos la evolución del precio promedio de los granos, aceites y harinas, en términos de Dólares constantes, nos encontramos que actualmente estamos así:
– Poroto de Soja: Un 5,84 % por encima del promedio del período 1994-2007 pero un 26,42 % del máximo ocurrido en 1997.
– Aceite Crudo de Soja: Un 5,00 % por encima del promedio del período 1994-2007 pero un 32,45 % del máximo ocurrido en 1994.
– Pellet de Soja: Un 1,04 % por encima del promedio del período 1994-2007 pero un 37,44 % del máximo ocurrido en 1997.
– Maíz: Un 31,11 % por encima del promedio del período 1994-2007 pero un 30,69 % del máximo ocurrido en 1996.
– Trigo Pan: Un 7,83 % por encima del promedio del período 1994-2007 pero un 47,03 % del máximo ocurrido en 1996.
– Harina de Trigo: Un 1,32 % por encima del promedio del período 1994-2007 pero un 45,5 % del máximo ocurrido en 1996.
Toda esta información se puede obtener del archivo adjunto «Series de precios productor USA y de commoditie en Argentina.pdf». Si prefiere, puede recurrir al otro archivo adjunto, donde se efectúa un similar análisis, a partir de la actualización de las series de precios por vía de la aplicación del Indice de Precios al Por Mayor Nivel General.
Supongamos que no producimos más biocombustibles y tampoco aceptamos más transgénicos, entonces, como haremos para abastecer la demanda restante de granos?…Seguramente avanzaremos sobre la frontera agrícola, de manera mucho más salvaje, para aumentar la oferta de granos. Sería muy oportuno comprobar que esto es así…
h. Frente a la exageración del dilema «alimentos – energía», debemos considerar también el dilema «agro – ganadería». Yendo a análisis extremos, podríamos comprobar que utilizando toda la proteína de soja que se produce en el mundo actualmente, estarían aseguradas en un porcentaje muy alto, las necesidades proteicas de los 6.546 millones de habitantes. Y aún así, podríamos seguir con la producción de biocombustibles. Pero no seamos irracionales, planifiquemos con inteligencia un mundo sustentable, donde la producción de alimentos sea acorde a los requerimientos calóricos de todos los habitantes, como así también, la de energía frente a la necesidad que la economía mundial crezca a tasas razonables. Tomemos conciencia de la importancia de trabajar en pos de un planeta que está amenazado por el calentamiento global, la escasez de agua potable, la degradación de los suelos, la escasez de energía y fundamentalmente, por la desigualdad social. La eficiencia en el consumo energético debe ser un mandato, no una simple aseveracion.
i. En materia de política económica, debemos tener presente todos los días que los grandes problemas de la humanidad -no solo de Argentina- son la concentración económica y la mala distribución de la riqueza. Los biocombustibles no tienen la culpa, esto es innegable. Sin embargo, la politización del tema, llevará a mucha gente de bien a creer que está naciendo un nuevo monstruo. Y para peor, los argentinos nos caracterizamos por convertir las oportunidades en problemas. Digamosle NO a los fundamentalismos!
j. Si nuestra decisión como país pasara en un futuro por no producir biocombustibles, la consecuencia inmediata será entonces que seguiremos exportando los mismos commodities de siempre. Y seguramente, muchos importadores serán quienes convertirán los mismos en biocombustibles. A favor de quienes estamos operando?…Seguramente que no lo estaremos, a favor de los intereses del País.
Por Claudio Molina – Presidente de la Asociación Argentina de Biocombustibles
Fuente: http://www.totalnews.com.ar/